Ayer tuvimos la oportunidad de reunirnos con Carmen Vela, máxima responsable de la política científica estatal como Secretaria de Estado de I+D. Este encuentro fue propiciado por la Asociación Española de Comunicación Científica, para facilitar la transparencia de la institución.
La primera parte de la exposición de la secretaria se centró en un aspecto polémico, los presupuestos. Vela admitió que el presupuesto dedicado a Ciencia por parte del estado no ha hecho más que bajar desde el 2009. Esta caída, sumada al desplome del capital riesgo en 2008, hace que nos preocupemos por la situación científica de España. Con razón, Vela preve que dada la complicada situación económica española, nuestro PIB no se recuperará hasta el 2017.
La situación es preocupante, pero no sólo en inversión pública y capital riesgo. Y es que nuestro país está a la cola en financiación privada de la ciencia. Vela concretaba ésta en un 53%, incluyendo investigación empresarial, capital riesgo y mecenazgo. Mientras, países como Japón ostentan un 90% y la media de la Unión Europea se sitúa en un 66%.
Para ello, desde el Ministerio de Economía y Competitividad se han desarrollado dos normativas. La primera, la Ley de Apoyo a Emprendedores, facilita y recompensa fiscalmente los esfuerzos del equipo emprendedor; aunque este todavía no declare ganancias. La ausencia de beneficios en primeras fases es algo habitual en empresas de desarrollo de medicamentos, aunque sean estas las que más se revaloricen.
La segunda es la Ley del Fomento de la Financiación Empresarial, también conocida como “Ley del Crowdfunding”. Esta ley pone límites tanto a los inversores como a las empresas emergentes que buscan capitalización, que no pueden levantar rondas mayores a dos millones de euros a través de inversores casuales. Nos resulta algo confuso limitar nuevas formas de capitalización cuando la financiación privada está tan lejos de los estándares europeos. Anteriormente, el que fue Adjunto a Dirección en ASEBIO, Jorge Barrero explicaba que no había suficientes fuentes de financiación para cubrir la totalidad de oportunidades de inversión en biotecnología y ciencias de la vida.
No obstante, no todo son malas noticias para los emprendedores. Durante su exposición, Vela anunció la creación de un Fondo de Capital Riesgo y Private Equity en colaboración a través del CDTI. También resaltó la importancia de contar con la ciudadanía a través del crowdfunding y la divulgación, con el objetivo de fomentar el reconocimiento social de nuestra ciencia. Por ahora, en Capital Cell permanecemos atentos sobre cómo se desarrollan estas leyes y cómo se fomenta la emprendeduría en ciencias de la vida.
Recolectamos lo que más nos gustó de la reunión en el storify que puedes disfrutar a continuación: